Los 7 mitos del Sueño Infantil

Hay muchos mitos y mentiras en torno al sueño infantil que circulan hace muchísimos años y que hoy, incluso después de haber sido refutados por la evidencia científica, todavía tienen mucha fuerza en las redes sociales. 

 Sé que muchas de estas creencias generan mucha culpa, frustración y desesperación en mamás y papás, a los que no solo se les dan instrucciones que directamente conspiran contra un descanso realmente reparador para sus hijos, sino que también se les asegura  que no hay nada que hacer para mejorar el sueño de su bebé. 

¡Y esto no es así!

Yo soy un claro ejemplo de ello. No solo he logrado pasar de despertar hasta 12 veces por noche con mi hija Curry a lograr que durmiera toda la noche de corrido, sino que he ayudado a otras 9.000 familias a que también pudieran conseguirlo. 

¡Aquí te explico uno a uno por qué estos mitos simplemente no son verdad!

Frases comunes sobre el sueño infantil que no son ciertas

Todos hemos escuchado más de una vez frases del tipo: “Si tu hijo no duerme durante el día, llegará con más sueño a la noche” o “acostúmbralo a dormir con luz y ruido en todas partes”. Vamos a ver una a una por qué estas afirmaciones que tanto se repiten en verdad no son ciertas. 

MITO #1: "​Que tu hijo no duerma en el día hará que a la noche tenga más sueño”

Esto no es así. De hecho, es todo lo contrario. Si tu hijo no duerme la cantidad de siestas que le tocan en el día, no respetas la cantidad de sueño diurno que le corresponde a su edad ni sus ventanas de sueño (el tiempo que debería permanecer despierto entre una siesta y otra), lo más probable es que llegue sobrecansado a la noche. 

¿Esto qué va a hacer? Muy lejos de la creencia de que “lo hará dormir bien porque está cansado”, lo que hace el sobrecansancio es que pone a tu hijo en estado de alerta. Por lo cual, será muchísimo más difícil dormirlo y seguramente tenga muchos más despertares en la noche. Esto nos lleva a otro de los grandes mitos del sueño infantil…

MITO #2: “Si no parece cansado, es porque no lo está”

¿Qué pasa cuando un niño está sobrecansado? Su cerebro comienza a liberar cortisol y, de hecho, puede parecer que está súper activo y con mucha energía. Es como si le hubieras dado una bebida energizante. 

Pero esto no significa que no necesite dormir sino todo lo contrario. Justamente, está así porque ya debería de haberse ido a dormir hace rato. Seguramente, se pondrá irritable y al momento de acostarlo luchará, llorará mucho más y será muy difícil poder dormirlo. Además, como ya vimos en el punto anterior, todo ese cortisol que ha liberado su cerebro hará que probablemente tenga muchos más despertares en el noche. 

MITO #3: “Debes acostumbrar a tu hijo a dormir con luz y ruido”

Esta frase es muy típica. “Acostúmbralo a dormir donde sea y de la forma que sea”, así luego se adapta mejor a ti. Pero, ¿qué pasa? Si tu hijo duerme con luz y ruido, su cerebro se va a mantener en estado de alerta y no va a entrar en un sueño profundo y realmente reparador. ¿Tú duermes mejor con luz y ruido o con oscuridad y silencio?

Para que tu bebé no tenga lo que yo llamo “sueño chatarra”, es clave generar las condiciones necesarias para que su sueño sea de calidad. Para ello, lo que recomiendo es oscuridad total, que es lo que permite que se produzca la melatonina, que es la hormona del sueño. También, usar ruido blanco. Es decir, un ruido constante, que permita aislar el ruido de ambiente. 

MITO #4: “Una siesta en la carriola es igual a una en su cuna o cama”

Te pregunto: ¿Tú cómo duermes mejor, en un avión, en un carro o en tu cama? El sueño siempre va a ser más reparador en una superficie plana y sin estar en movimiento, ya que eso lo mantiene en estado de alerta. 

MITO #5: “Cuando cumpla un año, comenzará a dormir mejor”

El sueño infantil es una montaña rusa, no hay un año en el que naturalmente comienza a dormir mejor por su cuenta. El sueño de tu hijo no va a mejorar porque sí, tienes que hacer algo para que eso suceda. 

MITO #6: “Cada vez que se despierta en la noche es porque tiene hambre”

Los niños no siempre se despiertan por hambre. Pueden haber otros motivos que expliquen esos despertares nocturnos: frío, calor, necesidad de consuelo…pero la razón principal suele ser que no saben conciliar el sueño de forma independiente. 

MITO #7: “Debes resignarte hasta que tu hijo empiece a dormir bien por su cuenta, a los 5-7 años”

Esta frase quizás sea la que más daño ha hecho, porque le da a madres y padres agotados el mensaje de que deben resignarse, de que no hay nada por hacer. Y eso no es cierto. Mejorar el sueño de tu bebé está en tus manos. Puedes lograr que tu hijo aprenda a dormir 11 o 12 horas de corrido a partir de los 4 meses y Noooooo, eso no implica dejarlo llorar en su cuna solo. 

¿Quieres que tu bebé duerma así de bien?

Si necesitas ayuda para mejorar el sueño de tu bebé, te recomiendo el nuevo Programa Avanzado de Sueño 2.0 de SoyEsaMamá, donde aprenderás  todas las bases para que mejore el sueño de tu hijo y pueda aprender a dormir solito y hasta por 11 o 12 horas corridas por la noche.